"Para la Historia": España - Paraguay (por Henry)

Johannesburgo, Sudáfrica, 2010, 20:30h., 22 jugadores y la esfera más perfecta jamas creada por el hombre. Más de 200 millones de personas con sus ojos clavados en un campo verde llamado Ellis Park y dos países paralizados por lo que allí está apunto de acontecer, un partido de fútbol. Un juego creado por los ingleses hace más de 100 años para dirimir la pregunta más antigua cada vez que dos personas (o grupos) se cruzan... Quien es el mejor. Y es que no hay suceso en el mundo que suscite una reacción tan unánime tanto en lo físico como en lo psicológico que un gol en un partido de fútbol. Los puños se suelen cerrar antes de que los brazos los levanten al cielo, los pulmones se hinchan para mandar una bocanada de aire que se transforma en un sólo grito y el corazón se acelera para que la sangre llegue a unos órganos sobre excitados por el estado de alerta del cerebro que dependiendo, puede llegar a ordenar que aparezcan lágrimas en los ojos.

España histórica: Joaquin contra la banda - Ya pasó el peligro, en Francia 98 - Luis Enrique protesta.

Ayer fue uno de esos días... escuchar el triple pitido de un silbato hizo sentir a millones de personas en dos continentes las dos emociones más básicas del hombre en su estado más puro, la alegría y la tristeza. El pitido anunciaba el final del partido de Cuartos entre Paraguay y España que tenia como denominador común, la Historia. Si los Guaraníes nunca habían llegado a esta instancia en un Mundial, España nunca había llegado más lejos (fue 4ª en 1950, pero con su sistema de grupos). De los mundiales nos hemos ido perdiendo y ensangrentados (contra Italia 94), empatando contra un equipo que sólo tenia una estrella, el portero (contra Bélgica 86) y hasta ganando a los locales, pero no a los caseros (contra el árbitro y Corea 02). Todos estos antecedentes unidos a las demás eliminaciones habían forjado el status de la selección en el mundo del fútbol (pre-2008 ó a.L) éramos los perfectos invitados a la fiesta, no solíamos faltar (sólo 4, 54-58-70 y 74) y éramos la pareja de baile ideal cuando llegaba el momento de arrimarse, así las grandes no dudaban en colocarnos el cartel de eterno favorito, con un cierto aire de superioridad y falsa modestia, todo sea dicho.

España histórica: Fernando Hierro y el referí - Salinas camino a su gol - Remate de Michel.

Todo ese peso histórico se hizo notar en el partido y provocó que durante la 1ª hora del encuentro sólo pasasen 60 minutos (el destino estaba cociendo un desenlace acorde con la cita). Hay que decir que esos minutos estuvieron mucho mejor gestionados por el equipo americano, sorprendentemente muy bien desplegados a lo largo de todo el terreno de juego y con un planning" de trabajo mucho más específico que el de los europeos. La posición ganaba la partida a la posesión y un saque de banda ganado por Cardozo o un balonazo bajado por Valdez traían más peligro que 15 toques de Xavi e Iniesta. Pero pasada una hora, el caldo de cultivo llegó a su punto de cocción óptimo, había llegado el momento de añadir los ingredientes del fútbol: emoción, azar, destino, sufrimiento, incertidumbre, tragedia y gloria. Los acontecimientos los desencadenó Piqué al cometer un penalty que estuvo más cerca de una llave de Wrestling que de un agarrón dentro del área. Cardozo (máximo goleador de la liga portuguesa) que venía de clasificar a su equipo pateando (suavecito y por izquierda) el 5º penal de la tanda frente a Japón, colocó el balón a 11m. de Casillas y... Zaas!! la rompió por la derecha, justo dónde la esperaba Iker que atajó la Jabulani con especial seguridad, cómo si alguien le hubiese dicho donde iba a ir. Ese alguien era Reina (3º portero) que se había comido dos penaltis de Cardozo en un Benfica-Liverpool. La parada de Iker superó a cualquier otro flashback y convirtió al equipo instintivamente en el campeón de Europa otra vez. En la siguiente jugada (1min después) Villa se plantó sólo delante de Vallejo y tras un forcejeo con un defensa, se dejó caer dentro del área. El árbitro no se pudo resistir a la euforia del momento y se sintió protagonista, penalty. Xabi Alonso agarró el balón, (yo me acordé de Ies, Gourcouff, Green y Kaka y pensé "quien me manda a mi enseñar fotos de chicos en vez de chicas") tomó carrera y GOOOL!!...tras volver del balcón donde escuchaba cantar el gol a la ciudad entera, me encontré a Xabi colocando la Jabulani otra vez, había que repetirlo... la causa oficial es una leve invasión de área, pero la verdadera la razón sólo la sabemos Ies y los lectores del blog. Repetir lanzador cambia la ventaja al lado del portero, que ahora ya tiene la pregunta clara "Lo lanzara igual?". Por supuesto (por nosotros) Xabi lo falló a la 2ª y tras su rechace, Vallejo cometió otro claro penalty sobre Fábregas, pero 4 penaltis en 2min es demasiado hasta para un árbitro guatemalteco en un mundial. El partido estaba roto, las nuevas incorporaciones (Fábregas, Pedrito y Santa Cruz) llevaban peligro a una y otra área y el 0-0 no era apto para cardiacos. Cómo tampoco lo fue el gol que decidió el partido... la Jabulani toco hasta 3 veces el palo antes de alojares en la red de la portería paraguaya.

España histórica: Peleándola en México 86 - Cardenosa y en penal atajado - De local, cubriendo a Rummenigge.

Con su gol Villa no sólo supero al Pipita y a Vittek en la tabla de goleadores (bendita frase), sino que se acercó a Klose y Ronaldo, porque el gol del guaje valió por el de Michel 86, Salinas 94, Morientes 02, Cardeñosa 78 ó Zubi 98. El partido tras 12 eternos minutos terminó con el resultado de 0-1 y llevó a España por primera vez a las semis de un Mundial junto a Uruguay, Holanda y Alemania con la que nos jugaremos el pase a la final. Objetivo cumplido para este humilde redactor... y es que para mí el trabajo te coloca en semifinales y la gloria te la da el destino, así por primera vez perder no será sinónimo de volver a casa desde donde nos verá el resto del mundo jugar contra Alemania el próximo miércoles, en una revancha de la final de Viena que promete ser el mejor partido de fútbol del campeonato... que así sea y que gane el mejor.