Chau Brasil 2014! Perdón por todo. Gracias por nada. (por Иісо)

A 10 días de finalizada esta etapa deportiva cuatrianual tan emotiva nuestro bleeeergh se despide, por el momento, con una review visual alla Sgt Pepper que compila eclécticamente todo aquello anecdótico que nos dejó la Copa. Todo aquello que también aporta, por qué no, a nuestros recuerdos, al fútbol y a la historia.

(Click en la imagen para ampliarla)

Asimismo acompaña el collage, así como acompaña una plasta de arroz blanco sin sal, un inspirado poema que nuestra lectora María Hermosa escribió para honrar al Mundial de Brasil 2014 y nos mandó para su publicación. Un cacho de cultura, cheeeeeeee:

Ver  tus goles fue mi anhelo,

gran Brasil dos mil catorce,

de la pifia de Marcelo,

hasta el puto gol de Götze.

Parece que empezaste ayer

Y ya llegaste a tu fin.

Así dejamos a Neuer,

y nos buscamos otro Putín.

España defendió su corona,

en el gran estadio de Río.

Dijo “chau” en primera ronda.

Que ffffffffffffffffffffffffffffffffrío.

Ingleses, fanchutes y tanos

se fueron con el culo corazón roto.

Pero no fue todo en vano.

Aunque sea consiguieron Garotos^®.

Por morder, a Suárez le toca

suspensión y poner guita.

¿Si es por ejercitar la boca,

cuánto garparía el Pipita?

A Cristiano rápidamente

le tocó armar la valija.

Extrañaba, claramente,

el contacto con la ... gente.

Se pincharon los de Rueda,

la palma del viaje los hizo perder.

Volaron con línea aérea:

Fly Airways, de Les Luthiers.

Con Lavezzi todas se han mojado,

(por aquel chorritoo de water)

Fue ese el chorro más nombrado,

desplazando a Joseph Blatter.

  

El pueblo brazuca a Dilma

el gasto en dólares le achaca:

“Le hubieramos ido a Costa Rica,

y hoy nos forrabamos en plata!.”

Nos volvió a decepcionar,

la histórica verde-amarilla.

El único crack de Neymar,

fue el que hizo su costilla.

Brasil, decime qué se siente

quedarte afuera de casa.

Ver cómo los demás se divierten,

desde el patio, por la ventana.

Scolari, no me extraña,

que perdieras con premura.

La próxima contra Alemania,

poné de entrada a Nishimura.

Yo que vos lo probaría

también al 9 de Los Andes.

Y atrás no desentonaría

una tal Sole Fernández.

De local te hicieron siete,

fue terrible ese bailete.

Se intercambiaron los roles,

y te rompieron...el record de goles.

Te vacunó feo hasta Holanda.

Hiciste un papelón mundial.

Te volviste en falsa escuadra,

por el borde del Fangal.

Tu actuación fue un tanto insulsa,

te golearon más que a Honduras.

 Ni el Pan de Azúcar endulza,

esa terrible amargura.

Cambiaste mucho de casaca,

cambiaste mucho de color.

Del bochorno no te salva,

ni tu Cristo Redentor.

En tu tribuna no está Larissa,

ni el pulpo Paul, ni Vuvuzelas.

Si querés una buena torçida

agachate y conoce la... de argentina.

- María Hermosa, minutos antes de su internación en el Moyano - 

ARGENTINA es de donde soy.

País que propicia el encuentro

del “En héroe te convertís hoy”

y el “Vos también la tenés adentro”.

Gruesa chance tenía

Argentina de ser Primero.

Tan gruesa esta parecía

que se la culeó Agüero.

Alemania, candidatazo,

fue el equipo de mejor raza.

Se escucharon sus bombazos

hasta en la franja de Gaza.

Alzó el premio finalmente

el capitán Schweinsteiger.

Quedé tan, pero tan caliente

que te hacía sonar un contador Gaeiger.

(mirá lo que te rimo, cheeeeee)

Todos ganaron en la premiación:

Lionel fue el mejor jugador,

y el Cebollitas Subcampeón.

James ganó el goleador,

un Oscar Fred por la actuación,

y Tevez ligó un LED color
para mirarla desde el sillón.

Messi, no quedan dudas,

alguna Copa va a levantar.

Si no fue en este la Pulga...

¿Será Thiago en el de Qatar?

Otra historia que se ha escrito.

Otra Copa que queda atrás

Nuestro bleeergh ya pide a gritos

una nueva: MUNDIAL YAAAAAA!!

No importó perder de nuevo,

no importó alentar en vano.

Solo importaron tus huevos:

Gracias Javier Mascherano!!!

Ya me voy sin despeinarme,

doy por cerrado este Mundial.

No sin antes desquitarme:

"Tano puto, ERA PENAAAAAAALLLL!!!!!!!!"

Chau Brasil 2014! Perdón por todo. Gracias por nada.

Siamo Fuori

La Final!

Quién se acuerda de estos 3 papeloneros?

La Salchicha Mecánica: Brasil-Alemania (por Иісо)

Primeramente me siento en la obligación moral de aclarar como integrante de las altas cúpulas de este bleeeerg, que la review correspondiente al partido Chile-España se ha perdido para siempre porque la farofinha que la trasladaba desde Belo Horizonte hasta Argentina para su publicación sufrió la caída de un viaducto encima y la arruinó. Una Pena. Para que no ocurra lo mismo con las de los partidos Argentina-Nigeria, y Alemania-Francia ya las entregamos al periodista de Olé el Topo López para que las haga llegar sanas y salvas. Gracias por el favor topito!!

Ahora si, vamos al grano. Brasil-Alemania por la primera Semi del Mundial 2014. Muchos esperaban ver en este encuentro un equipo lujoso de estilo latinoamericano, de escuela de tiki tiki que bailara a otro rústico, duro e impreciso. Bueno, en cierto modo los que esperaban ver eso no se fueron del todo decepcionados. Lo cierto es que los locales no mostró la calidad futbolística propia de su historia en ningún partido de esta Copa. Así como hace unos años en el marco del debate por el reconocimiento de las travestis en Argentina surgió este argumento: “Ponerte pollera no te hace mujer”, yo lo retomo y lo adapto para decir: “Vestirte de amarillo no te hace un jugador de la selección Brasileña”. Lejos está la de-formación actual de las otrora glorias que supieron ostentar la casaca de PentaCampeaô de mi corazón. De hecho lo único más o menos verde-amarelho que se pudo ver hasta ahora por parte de estos impresentables fue el fajo de dólares que empuñó el ponja Nishimura por pitar el penal inventado del debut. Los locales llegaban devastados a un partido clave. Thiago Silva suspendido y Neymar out. Cuestión muy preocupante, porque sin estos dos jogadores la columna vertebral del equipo estaba rota. Mala analogía. Ok. Seguimos. El tema era que venían de un rendimiento funesto en la fase de grupos y se enfrentaban contra un cuco. La última esperanza que tenían era, ya que los estadios estaban todos a medio terminar, que la única parte que la FIFA habilitara del Mineirao fuera el arco que defendían los teutones y los cagaran a pelotazos los 90 minutos. Creo que ni así les hubiesen podido hacer partido. En Fin...

Neymar no se pudo hacer presente en el estadio porque como en el último año filmó más propagandas que Verónica Varano ahora aprovechó el envión, agarró un canje con una casa de ortopedia y firmó nuevo contrato de exclusividad. Así y todo los cariocas se acordaron de él y lo tuvieron presente en el vestuario y durante el himno. Todos estaban muy entusiasmados, y tenían en su cabeza el Sueño mundialista. Pero se olvidaron de ponerse la alarma del despertador y salieron al campo dormidos y sin sacarse del todo las lagañas. Que pesadelo...

Neymar en el Muro de los Lamentos (No, no es photoshop!)

Ya estaban todos los preparativos para empezar el match. La telegráfica de la formación Brasileña tan típica de esta Copa la cerró uno de los más experimentados del plantel: Julio Cesar, que cruzó los brazos con tanto ímpetu que me dio la impresión de que no se los pudo descruzar hasta media hora después de terminado el encuentro.

La primera parte fue de una intensidad enorme. Idas y vueltas, trabadas e intentos, y bastante parejo. Low había ordenado un 4-1-4-1 rarísimo en la cancha que tenía más pinta de canción de Rafaela Carrá que de dibujo táctico para aguantar los embates de un Brasil que iba e iba. Además los brazucas parecían estar lo suficientemente bien plantados en el fondo. Claro, eso hasta  el minuto 11, en que un corner cae bastante llovido sobrevolando el área. Julio Cesar, que salió a pescar como si hubiera hecho un curso de pesca de mosca con Opatowski, ni le arrima a la bocha y el aparato defensivo (cuando digo “aparato” me refiero a David Luiz, más precisamente) le regala la chance al despiadado Thomas Müller de acomodarla en la red de un toque sutil. Gol-pazo. Pusimos un micro en el arco, pero nos lo dieron vuelta los manifestantes, habrá pensado Scolari.

El Pentacampeón se desarmó. Se cegó por sus ansias de empatarlo, y por la terrible humareda que emanaba este plantel decepcionante. Desesperado, sacó a relucir su horrendo rostro mulato de equipo sin ideas. Todos comenzaron a jugar mal. Todos. No se salvó ni uno. Hasta la mitad del primer tiempo el mediocampo amarelho tenía menos ideas que el publicista del Momo Benegas. Solo atinaban a tirar pelotazos al fantasma de las glorias pasadas sin encontrar nunca la referencia de un Fred que parecía que se había quedado sin aire desde el momento de cantar el himno. Para colmo de males los europeos querían más sangre y empujaban en manada contra el arco de los locales. En una a Klose le queda la pelota en los pies en el área chica y le remata a un Julio Cesar que no le puede regatear ni a Chum Lee en la tienda de empeño. Le rebota en su inmensa pera y se la deja servida a Miroslav para que este –panquequeo en el aire, y lo llamo- ídolo, genio, gigante, le reviente el arco, el record de goles en mundiales al gordo, y la poca esperanza que le quedaba a algún brazuca perdido por ahí en el Amazonas de emparejar el match.

Los alemanes quemaron todos los libros de historia futbolística en este partido. Y van...

El equipo de Brasil podía definirse en dos partes claras: el ataque es escaso y la defensa es tupida. Quiero decir, la defensa estúpida, porque durante lo que probablemente fue el pasaje más fffffffffrío de la historia de los Mundiales a los defensores cariocas los complicó hasta la tabla del 0. Yo ya estaba puteando a la cámara área y quejándome de lo molesta que resultaba su sombra que iba de acá para allá estorbando la vista, cuando me di cuenta que en realidad se trataba de Marcelo, que esta vez estuvo tan fantasmal e impreciso que ni siquiera atinó a meterse un gol en contra como con Croacia.  Por su parte David Luiz, Dante y Maicon estaban tan descolocados por las vacunas tempranas de los germánicos que no miraron nunca para atrás. Más que los ojos en la nuca de Zidane parecían tener los Ojos en la Espalda de Cumbia Ninja. En dos ocasiones la mortal dupla Kross-Khedira les descuidó el esférico y encararon para el arco tocando que daba miedo. Los teutones no construían paredes así desde los bunkers de la 2º Guerra Mundial. En a penas 4 minutos el doble cinco visitante calvaba 3 goles con más autoridad que suerte y en el estadio se sentía un... SILENCIO AKROOS!!!!

♫ Brasil no me digas que se siente... porque ya me acuerdo del Mundial pasado ♫

Sin embargo después de 5º gol, Brasil salió. No el equipo para adelante. La hinchada salió del estadio. La torcida se iba del Mineirao en un acto de deplorable y asquerosa cobardía y abandono (neutralidad yo? a dónde?).  El tiempo de la primera parte se iba acabando y al ver que la última línea tenía más dudas que Alejandro Van Den Brule armando su declaración jurada un Scolari enloquecido les daba indicaciones desde afuera: “Nosotros seu lus de amarelloh, pedazu do mortos!!” les gritaba.

Cuando ya el árbitro draculezco estaba por pitar el entretiempo, Julio Cesar salva lo que sería el cesto. El cesto de la basura. Era lo único que le faltaba llevarse de lo que no estaba atornillado al suelo de su despacho en la Federación Brasileña, porque ya se veía venir que a toda esta generación entera los iban a echar a la mierda del país para siempre.

 Si Pelé se comió un pebete, ahora que la haga completa y se coma esta salchicha.

En el descanso un más que optimista Felipao revisó su plantilla de jogadores para encontrar a un desequilibrante, pero se decepcionó cuando se dio cuenta que como toda ‘plantilla’ esta estaba por debajo de la media. Cheeeeeee. El plan de Scolari para la segunda parte era audaz. Propuso las siguientes tareas a su cuerpo técnico para dar vuelta el encuentro:

1. Meter a Gerardo Sofovich en la FIFA para que enmarañe las reglas y que Thiago Silva pudiera entrar aún estando suspendido.
2. Repatriar a Adriano y Ronaldinho de algún sauna en las Bahamas, hacerles una lipo y enfundarlos de verde-amarelho.
3. Conseguir el exoesqueleto del pibe paraplégico de la inauguración y hacer entrar a Neymar a lo Mazinger Z.
4. Ubicar a Larissa Riquelme medio en bolas detrás del arco local para desviar la atención de los atacantes rivales.
5. Nacionalizar a Mandrake.

Todo eso en menos de 15 minutos. Dado que no pudo llevar a cabo ninguna de estas tareas, no tuvo más que dejar el mismo equipo en cancha y salir a no comerse otros cinco, pero les exigió a sus dirigidos que fueran una alineación revulsiva y que pusieran garra. Se ve que el terrible silencio que habían hecho sus hinchas aturdió tanto a los jugadores que no escucharon bien y confundieron los términos. En lugar de ser una alineación, fueron una alienación. En lugar de poner garra, apenas si llegaron a poner pezuña los muy rústicos. Y en lugar de ser revulsivos, fueron repulsivos, porque los primeros quince del segundo tiempo no hicieron pie para nada más que intentar tirarse vergonzosamente en el área rival sin mayor éxito.

Y como si todo esto fuera poco el arquero Neuer, más duro que una puerta Pentágono, estaba recostado contra el palo leyendo la obra completa de León Tolstoi y cuando los brazucas amagaban con acercarse al arco no solo se tapaba TO-DO, también hasta se daba el lujo de hacer las veces de último hombre y salir acortar rápido. Gigante.

Por la mitad del segundo tiempo Lôw metía a Shcurlerllrlelrlre (aprox), el coloradito desconocido que antes de los 20 minutos en cancha le clavó de a dos al dueño de casa para sellar el 7-0. Que tul? menos mal que los pelirrojos eran yeta.

La tribuna se viene abajo. Le gritan “Ole!” a sus propios jugadores. Chiflan, abuchean. Brasil juega tan que hasta Thiago Silva (cheeeeee). Los de Löw eran un reloj. Y un bisturí. Una máquina rompesueños propulsada por las lágrimas de sus rivales. Faaaaaaa. Se armó la Salchicha Mecánica, señores. Encima, como si la humillación fuese poca, a los 80’ un David Luiz que era una maraña de rulos y nervios, recrea el escracho. Intenta patear la pelota, pifia, de bronca intenta patearlo a Müller que andaba por ahí, y también pifia, y finalmente en un gesto de impotencia patea con todo al pasto, pero también le pifia.

A partir de ahí la estrategia cambia. A Scolari se lo pudo ver planeando con su cuerpo técnico. Libreta en mano, tirando flechas y esquemas para todos lados. Yo creo que estaban analizando el mapa del estadio, viendo una forma de salir con vida rápidamente de ahí adentro.

Parreira, David Luiz y Scolari prueban de qué se van disfrazar después de este partido.

Faltando apenas 2 minutos para el final Özil roba la pelota en el área rival y encara para el arco. Pero tal vez guiado más por su ojo derecho, diametralmente opuesto al izquierdo, la cruza y desvía el remate. El desagradable relator oficial dijo: “Atracar de improvisto por atrás es la única forma que tiene Özil de penetrar”. Che, que no es taaaaan feo. En fin, la cuestión es que ese remate desviado lo recuperan los locales que le meten un pelotazo desesperado a Oscar para clavar el gol de la vergüenza. MANO LOCAAAAAA. Conociendo a los brazucas ojo que no lo del vuelta eh!! Lo más triste es que Scheiteugue... Johnsteigueere... Yasutaigue...eeeh... el 5 teutón se enoja terriblemente con Özil por no definir bien y permitir el descuento, en un acto que ya parecía más una gastada que otra cosa.

Final del partido. Histórico 7-1. Disputándose, además de una simple Semi, el título de Equipo más importante de la historia de los mundiales. Quedó demostrado algo. Alemania no es el papá de Brasil. Es el tío pedófilo. Difícil elegir la figura del match. Los germánicos no tienen UN jugador bueno. Buenos son todos. En eso estuvieron parejos. Los cariocas tampoco tuvieron un jugador bueno. NI UNO tuvieron. Los europeos ganaron con credenciales, e hicieron mella en la historia. No se hable más.

Se dijo por ahí en las redes sociales, que a los jugadores verde-amarelhos más que el antidoping van a tener que hacerles el Evatest. Es cierto. A Brasil le dicen Jim de American Pie, porque cada vez que organiza una fiesta en su casa terminan todos en pedo y con el culo roto. En la conferencia de prensa post partido Scolari declaró: “Con este equipo voy a la guerra. Siempre y cuando sea CONTRA ellos. Arrancamos jugando una buena Copa... pero qué querés? se levantó un Zuñiga terrible!!. El error fue mío. Debería haberlo puesto al árbitro japonés de entrada”

♪ Y hoy te vas, te vas, te vas, TE VAAAAAAAS! ♪ 

Para terminar, me pongo serio para explicar un poco lo que me pasó viendo este partido.

Me gusta el futbol. Me crié en un país futbolero. Desde bastante pequeño consumo partidos y publicaciones relacionadas con este deporte. Sin embargo nací a finales de la década del 80’, casi 100 años después de haberse inventando este, por lo que me perdí la chance de vivir gran parte de su historia épica. Hechos, personajes, jugadas, selecciones, equipos, finales. Nunca vi a mi país salir campeón el mundo a pesar de haberlo conseguido. No disfruté de su mejor jugador en épocas de esplendor. No vi la Holanda de Cruyff (que fue el que hizo un quiebre en el individualismo como Freud y Galileo (?)), ni la Hungría de Puskas, ni el Brasil de Pelé y Garrincha, ni las atajadas de Yashin, ni a Bekenbauer, ni a Platiní. No nací a tiempo para ver lo que ocurrió en el Maracaná en 1950. Si, lo leí miles de veces, lo escuché a través de miles de voces distintas, vi un que otro video borroso en blanco y negro de gente con sombrero y bigotes que me resultó bastante ajeno. Lo que nunca pude fue imaginarme como habrá sido ver eso en vivo. No tuve ni la menor idea, siempre me resultó imposible siquiera imaginármelo. Habrán sabido que ese momento iba a quedar para la historia?  Que se siente al saber que ese momento, ese instante en el presente, se va a prolongar para siempre? Que se siente al saber que cada persona que comparta tu pasión en el futuro referirá una y otra vez a ese hecho contemporáneo a vos, que pudiste ver en directo? No se. Nunca me entró en el balero. Hasta este histórico 7 a 1. Hoy, sigo sin saber que habrán pensado esos uruguayos de hace 60 años. Pero ya puedo empezar a imaginármelo. Ya tengo con qué empezar a comparar. Nunca creí que pudiera decir esto, más después de los últimos 2 mundiales. Y de lo que se nos viene el Domingo, pero... Gracias Alemania. Gracias al Fútbol.

♫ Brasil, decime que se siente,

comerte siete de local.

Te juro que de este Mineirazo,

nunca nos vamos a olvidar.

Que Müller los gambeteó,

Khedira los embocó.

Estás llorando desde Zuñiga hasta hoy.

A Klose lo vas a ver,

el record les va a romper.

Abandonaste en el minuto veintiséis ♫

Te rodeamos la manzana, Bastian!!!

Ya está.

Fangal

Don't Be Krull

7 a 1 y te fuiste!!!

Me emocionás, Fideo!