El que quiere Celeste, que festeje: Ghana - Uruguay (por Lila)

En uno de los partidos claves para acceder a un puesto entre los cuatros mejores del mundo, Uruguay se enfrentaba al único seleccionado representante del continente anfitrión que permanecía en la copa a esas instancias, Ghana.

El equipo celeste arrancaba con el pie derecho desde antes de salir a la cancha ya que, horas antes, había sido eliminado del mundial el más temible candidato al título (para más información sobre cómo llamar al equipo en cuestión, léase encuesta al costado –bien! le encontré una utilidad-), por lo que, de clasificar a semifinales Uruguay ya sabía que no tenía que enfrentarse a dicha potencia, aunque históricamente tampoco es algo que intimide mucho al equipo oriental, ya que es inevitable mencionar la gran hazaña de tal conjunto en la Copa de Brasil de 1950, cuando la Uruguay se enfrentó al anfitrión (claro favorito) en el último partido del torneo, dando vuelta un marcador desfavorable casi sobre la hora, produciéndose un evento histórico en el cual hasta se reportaron suicidios de hinchas del equipo local, tal como los intentos recientes de quienes afirmaban categóricamente que Brasil se alzaría con la copa de Sudáfrica 2010, comentario que podemos hacer sin titubear, porque en este Blog hay libertad total de expresión...cuando Rolando manos de tijera duerme.

La hazaña charrúa señalada se ha dado en llamar "Maracanazo". A falta de imágenes que reflejen la magnitud del acontecimiento, acompañamos imágenes del maraca y del nazo:

En ese contexto, Uruguay llegaba con las posibilidades de volver a meter a su equipo en semifinales después de treinta años; mientras que Ghana contaba con el apoyo de todo el continente africano, por lo que de no ser por el color de su remera que los distingue, parecerían ser una gran sombra… de aquellos otros equipos africanos que aspiraron al título anteriormente.

Como nota de color (otra que el agotamiento del chiste de Elano!) cabe destacar que Uruguay, pidió el veto de quien iba a ser árbitro del encuentro bajo el argumento de que su nacionalidad era inglesa, alegando que el mismo podía contaminar el evento de cierta subjetividad tomando revancha por el error del uruguayo Larrionda en el partido de los innombrables e Inglaterra; por lo que la FIFA habría hecho lugar al pedido, ya que prefirió evitar la nunca comprobada contaminación antes que soportar a todo un país reclamando, con o sin fundamentos, a posteriori. El árbitro del encuentro fue portugués, y para estar al nivel de su ya retirada selección, se destacó por la gran cantidad de faltas.

Los primeros 45 minutos del partido fueron bastante pobres, pero en la primera parte el mayor manejo del balón fue de Uruguay y hubo muchas pelotas paradas, no sólo por los córners sino porque el árbitro pitaba cual agente de tránsito en esquina céntrica con semáforo roto un viernes a las 5 de la tarde, cobrando numerosas infracciones a las que el equipo de Tabárez trató de sacarles ventaja pero no pasaron de ser intentos fallidos de Forlán y Suárez y un remate lejano de Cavani. Fue después de los 25 cuando empezamos a ver apariciones de Ghana y un juego más fluido, siendo recién hacia fines de la primera parte que las llamadas "estrellas negras" (será porque de noche no se ven?) comenzaron a lucirse con cuatro o cinco chances de gol, mientras que la tan hasta entonces elogiada defensa Uruguaya parecía haberse ido de viaje junto con el encargado de tal equipo en el blog, situación agravada por la salida de Lugano que se retiró por una molestia y, por si fuera poco, una caída de Fucile que lo dejó dormido en el césped, aunque versiones off de record aseguran que en el momento en que el jugador pasaba por el lateral, fanáticos africanos desde la platea lo habrían amenazado con la famosa "… duérmete ya o viene el cuco y te comerá…" señalándole al 3 Ghanés, por lo que el jugador, amedrentado, habría cedido.



Finalmente en los últimos segundos, Muntari, la figura del equipo africano, que no dejaba de asustar cada vez que se acercaba…a la cámara, logró convertir.

Los inicios del segundo tiempo fueron similares a los finales del primero, con un Ghana ofensivo y un equipo uruguayo cuyo costado derecho mostraba ser más de pacotilla que el de que Jaime Bayly; sin embargo, a los diez minutos llegó el tanto de Uruguay, golazo de pelota parada de Forlán (para Cristi que lo mira por Tv, o que se mira por Tv), uno de los hombres más envidiados en la actualidad, no sólo por salir con la menos grasa de las hermanas Nara sino por ser el único que hizo callar dos veces a las protagonistas femeninas de este Mundial. De ahí en adelante, si bien los africanos tuvieron unas pocas claras, el partido se inclinó más para el lado de los celestes, ya que no sólo Forlán y Cavani se adelantaron sino que también seguían insistiendo con pelotas paradas y otras cosas también, cosa que le faltó a varios a lo largo de lo que va de la Copa; mientras que los jugadores de Ghana se vieron obligados a buscar espacios, no sólo de juego, sino también de césped libre para caer tras los empujones que empezaron a repartir los uruguayos. En ese contexto se fue el segundo tiempo, cuya calidad deportiva fue decayendo hasta culminar con diez minutos finales de centros más malos que el de las Toninas, lo que llevó a que el partido se extienda más tiempo de lo que tardé yo en pensar un título que no parafrasee con la palabra ghana, ghanar y etc.

Que linda manito:
En la mayoría del tiempo de alargue no pude ver nada nuevo que les pueda comentar, básicamente porque se me cortó el cable y lo tuve que escuchar por la radio, lo cual suma un motivo más para ir directamente al grano. Y es definitivamente cuando en el último minuto de la extensión, Suárez, el DELANTERO del conjunto dirigido por "El Maestro" Tabárez, salvó a su equipo de la derrota, atajando con ambas manos sobre la línea del arco lo que hubiese sido el gol de la victoria de Ghana, en una actitud tan válida como polémica, que, como no podía ser de otra manera, ha dividido las aguas en dos; generando incluso que algunos hayan catalogado la posterior victoria charrúa como un "robo". Por nuestra parte ya podemos suponer lo que El Maestro opina ante ese estilo de planteos éticos: -"So?"; por otra parte el técnico de Uruguay sentenció: -"Cuando se comete una mano en el área el árbitro pita penal y expulsa al jugador y eso pasó. Es ofensiva esa palabra (robar), nos sometimos a la decisión del árbitro. Se puede decir que es un error del futbolista, pero eso de robar me desagrada, no creo que sea justo". Por si esto fuera poco para fomentar paralelismos, luego de la jugada de la polémica, el equipo africano volvió a fallar, errando el tiro desde el punto del penal; error que derivaría en lo que terminó siendo el pase a semifinal para Uruguay y marcando en la historia lo que el pueblo uruguayo a dado en llamar "la verdadera mano de Dios". No obstante, algunos representantes de Grupo Ben, si bien apoyamos al seleccionado celeste, lamentamos decepcionarlos en tener que decirles que de ninguna manera esa fue la mano de Dios, sino que como ya es sabido, la mano de Dios nos pertenece a todos, y es la que sostiene este otro globo:

Una cosa de locos!:

Por si la jornada hubiese sido poco ajetreada luego de la eliminación de Brasil y el controvertido final de los minutos de juego entre Uruguay y Ghana, aún cabe destacar el detalle de los penales disputados por estos últimos dos. El contador se encontraba 3-2 arriba para los uruguayos, y el designado para ejecutar lo que podía ser el pase directo a semifinal o al fracaso, era el "loco" Abreu; que haciendo claro honor a su apodo, decidió ejecutar con un débil pero efectivo pique que le dio a Uruguay el gol de la victoria, como si, pese a las dudas de sus compañeros, el jugador (que tiene sus seguidoras en la tribuna oriental) tuviese la certeza de que un Piqué le entraba sin dudas; colocando así a esta selección en la historia de las más grandes que hayan representado a su país; mientras que Ghana, por el contrario, no haciendo honor a su nombre (ya llegando al final del resumen me fue imposible evitarlo) se tuvo que volver a casa, pero cabe destacar que tuvo un paso digno por el Mundial, como también mencionar que el equipo celeste queda como único y más que digno representante del continente americano; y que en contra de varios pronósticos, tiene posibilidades de seguir escalando, dado que ya le ha tocado bailar con, sin duda, la selección más fea, y lo superó con poco fútbol pero con empujes, agarradas, locuras… y corazón. Motivos por los cuales se ha convertido en la candidata de muchos, sumado al hecho de que es la única selección sudamericana que puede alzarse con la copa, ya que las otras tres se han retirado en cuartos de final; pero hay que mirar para adelante y no quedarse con un mal recuerdo ni la exclusividad de la crítica como hacen muchos otros medios, por lo que, a modo de homenaje a la que ha sido la candidata de este Blog desde el primer momento, cerramos esta publicación recordando lo mejor que tuvo la selección de Dunga: